[Columna: Pareceres Varios] Hoy: Campamentos Musicales
Por Eduardo Salazar.
Cada año en diferentes ciudades de Chile se realizan diversos campamentos musicales como: Mancera, Calbuco, Costa del Maule, Picarquín, entre otros, en donde niños y jóvenes (entre 9 y 23 años) postulan de distintas zonas geográficas para ser capacitados en técnicas de estudio instrumental individual, práctica de conjunto en variadas formaciones y actitud escénica; todo esto como una manera también de preparar a los futuros instrumentistas de orquestas profesionales. La organización cuenta con el apoyo de la Fundación de Orquestas juveniles e infantiles, Gobiernos regionales, Consejo de la cultura y las Artes, Municipalidades y Junaeb entre otros. La actividad la lleva a cabo un equipo multidisciplinario, conformado por profesores destacados en cada uno de los instrumentos musicales de una orquesta.
Además es una buena instancia para intercambiar experiencias de vida en el ámbito de la música y personal, como también desarrollar las habilidades sociales, la disciplina, el respeto por el otro, rigor del estudio, el trabajo en equipo y buscar la perfección en la interpretación. sin duda es una buena iniciativa de realizar éstos campamentos en que niños y jóvenes a través de la música acceden a conocer su país y además desarrollarse intelectualmente, integrarse a la sociedad de manera autónoma para ampliar su mundo de relaciones.
La música, según la investigación científica, tiene una infinidad de beneficios tanto físicas: estimula las principales funciones orgánicas (ritmo cerebral, metabolismo, circulación, respiración); como psicológicas: despertar, evocar y desarrollar diversas emociones y sentimientos. No olvidemos que dentro de las terapias de sanación está la Musicoterapia, ciencia que se ocupa del mantenimiento y acrecentamiento de la salud tanto física como mental. ¡Viva la música!