Inclusión laboral desde una perspectiva de género: una brecha invisible
Luego de la promulgación de la ley N°21.015 hemos visto una creciente preocupación por los desafíos que se están enfrentando para cumplir con la inclusión laboral de personas con discapacidad. Sin embargo, hay una arista que no se ha mencionado y que plantea una oportunidad de encaminar esta iniciativa de manera equitativa si se considera la perspectiva de género. Según estimaciones del Foro Económico Mundial, la brecha global de género tomará unos 170 años para cerrarse, a menos de que el progreso se acelere. Esta realidad es similar en Chile, donde la proporción de mujeres con discapacidad, mayores de 18 años, es mayor que la de hombres, en casi un 8%. Sin embargo, la tasa de participación laboral femenina es del 37,2% versus un 53,1% en hombres. Estos indicadores se replican en nuestra experiencia como fundación, donde el 66,3% de los procesos que hemos llevado a cabo corresponden a varones, mientras que el 33,7% restante a mujeres. Es decir, ellos tienen casi el doble de probabilidades de tener un empleo en comparación, y esto se debería a que cuando las mujeres con discapacidad trabajan, a menudo experimentan situaciones como salario desigual por igual trabajo o inequitativas oportunidades de promoción y desarrollo de carrera laboral.
Si bien la baja participación de la mujer se manifiesta de manera transversal en nuestra sociedad, creemos que con la entrada en vigencia de la ley de inclusión laboral se abre una oportunidad para cambiar paradigmas, y para que todos los actores sociales miren esta iniciativa desde una perspectiva integral, dándole la oportunidad a miles de chilenas con discapacidad de sumarse al mundo laboral y así construir un Chile más justo y equitativo para todas y todos.
Carola Rubia
Directora ejecutiva Fundación Descúbreme