Investigación de la Dra. Mirta Crovetto reveló asociación de estado nutricional y pérdida de fuerza muscular en adultos mayores

Publicación que realizó académica de la UPLA junto a Camila Henríquez Mella y Lissette Pérez Bocaz, fue clasificada al Premio al Mejor Artículo en revista científica internacional.

El estado nutricional tiene una relación directa con la pérdida de fuerza muscular, en adultos mayores, condición que es más conocida como Sarcopenia. Ese fue el principal resultado de una investigación que realizó la Dra. Mirta Crovetto Mattassi, cuyo artículo publicó recientemente en la revista científica Nutrients.

El impacto de esta investigación en la salud de las personas es tan alto, que el Comité de Expertos de la mencionada publicación, preseleccionó el paper al «Premio al mejor artículo de Nutrients 2024», el cual compite junto a otras investigaciones internacionales.

Investigación

La académica del Departamento de Salud, Comunidad y Gestión, investigadora y ex decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de nuestra Casa de Estudios, desarrolló la investigación junto a Camila Henríquez Mella y Lissette Pérez Bocaz. El objetivo de la investigación fue describir y asociar este fenómeno al estado nutricional en un grupo de adultos mayores chilenos de 65 años y más. Para ello, realizó un estudio descriptivo, asociativo y comparativo, con diseño transversal y enfoque cuantitativo-cualitativo, en el cual participaron 155 adultos mayores chilenos mayores de 65 años.

Los resultados arrojaron que el 49,7% y el 5,2% de los adultos mayores presentó sarcopenia probable y sarcopenia severa, respectivamente; el 52,9% y el 7% tenía desnutrición por exceso y por déficit, respectivamente, según su IMC; y el 33,5% presentaba desnutrición según el MNA (Mini Evaluación Nutricional). El estudio reveló, además, que los participantes con obesidad tenían 3,2 veces más riesgo de presentar sarcopenia, frente a sujetos con estado nutricional normal.

“Estos resultados confirman la existencia de una asociación entre el estado nutricional y la sarcopenia según el IMC, y que los adultos mayores obesos tienen más riesgo de sarcopenia que los sujetos con un estado nutricional normal. Además, casi el 50% de los sujetos presentaba probable sarcopenia, condición que podría ser detectada precozmente en personas mayores, con el fin de tomar medidas preventivas en la red de atención primaria de salud”, sostuvo la investigadora.

Concepto

La Dra. Crovetto precisó que la sarcopenia se considera un proceso biológico natural asociado con el envejecimiento y las personas mayores. Sin embargo, precisó que también puede ocurrir antes en la vida. Algunos de los factores que contribuyen a la sarcopenia son la pérdida de masa muscular relacionada con la edad, las enfermedades asociadas, la inactividad física, el comportamiento sedentario, las dietas inadecuadas, la desnutrición y los estilos de vida. Se relaciona con una disminución de la fuerza y masa muscular, peor rendimiento físico, limitaciones funcionales y de movilidad, mayor riesgo de caídas y fracturas, enfermedades cardiovasculares y respiratorias, y una disminución de la calidad de vida y de las funciones sensoriales, cognitivas e inmunitarias. Es un trastorno muy prevalente y aumenta con la edad. Su prevención y tratamiento óptimo podría evitar cargas personales, sociales y económicas.

Camila Henríquez, académica.

En este contexto, la académica Camila Henríquez Mella llamó a las personas a tomar conciencia de la importancia que tiene la nutrición en la calidad de vida de las personas, la cual no solo está asociada a enfermedades crónicas no transmisibles, como la diabetes o la hipertensión, sino también a la musculatura de nuestro cuerpo, que permite el desplazamiento y funcionalidad.

“Es importante poner atención a cómo nos alimentamos, no tan solo en etapas avanzadas de la vida, sino también a temprana edad. El consumo de legumbres, pescados, huevos, lácteos y carnes bajas en grasas nos aseguran un buen aporte de proteínas de muy buena calidad que, junto a un consumo adecuado de frutas, verduras y cereales, sumado a la actividad física, pueden favorecer la mantención de la masa muscular, evitando la aparición de la sarcopenia», sostuvo Camila Henríquez.

La profesional agregó que nuestro país, las personas mayores beneficiarias del Programa de Alimentación Complementaria del Adulto Mayor (PACAM) reciben alimentos, los cuales han sido reformulados. Son fortificados en vitaminas como la A, D y B12, son bajos en sodio, lactosa, además de ser una buena fuente de proteínas, lo que contribuye favorablemente en la conservación de la masa muscular de las personas mayores.