Municipio viñamarino ejecutará obras de emergencia para reparar infraestructura en el borde costero
Una cifra del orden de los 100 millones de pesos es lo que está invirtiendo el municipio de Viña del Mar para ejecutar las obras de emergencia que permita recuperar la infraestructura pública liviana y equipamiento del borde costero, dañada por las marejadas de la semana pasada, monto que también incluye el retiro de escombros y limpieza de esta área, Av. Perú y Reñaca, proceso que finalizó durante el fin de semana.
Así lo anunció la alcaldesa Virginia Reginato durante un recorrido realizado en el sector del parque Bode Costero, donde pudo constatar los daños de este sector, especialmente en el paseo y áreas verdes, que fueron las más afectadas.
Acompañada del director de Operaciones y Servicios, Patricio Moya; el director del departamento de Construcción e Infraestructura Pública, Ricardo Muñoz y el director de Inspección Comunal y Tránsito, Alamiro Arias, la autoridad comunal dijo que estos trabajos se están ejecutando con celeridad, con el objetivo de que esta importante área turística esté habilitada para Fiestas Patrias.
“El borde costero tiene para Viña del Mar un valor agregado y turístico incalculable para el desarrollo de la comuna. Lo que se reparó el año pasado no fue afectado. Estos son daños nuevos, que es necesario reparar con urgencia, de manera también de brindar seguridad a los viñamarinos y visitantes que ocupan esta área de la ciudad para pasear en familia. Los mayores daños fueron provocados en la infraestructura liviana, como son las pasarelas y equipamiento, las que restituiremos prontamente, para que estén listas lo antes posible”, manifestó la alcaldesa.
Las obras, en el área comprendida entre Playa del Deporte y Muelle Vergara, consistirán en la demolición de 430 m2 de pasarela y su construcción, conformación de talud de 800 m2 y reconstrucción de escalaras de madera de acceso a la playa. En cuanto al mobiliario y equipamiento, como basureros y señalética, ya se encuentra repuesto.
DEFENSAS
Respecto a una solución definitiva que evite nuevas consecuencias de este tipo, el director de Operaciones y Servicios Patricio Moya, dijo “que después de la marejada del año pasado, se comenzó a trabajar en todo lo que significa defensa del litoral, desafío que está a cargo del Ministerio de Obras Públicas, a través de la Dirección de Obras Portuarias en el Instituto Nacional de Hidraúlica, que evalúa varias alternativas con el objetivo de disipar la energía de olas para que no golpeen con intensidad en el borde costero”.
En este sentido también, el municipio solicitó al Ministerio de Obras Públicas, a través de un oficio, el apoyo a la reparación de los socavones en Cochoa, debido a que tres de los eventos que existían se agrandaron y ahora surgió uno nuevo, que pone en riesgo la estabilidad de la vialidad del camino costero hacia Concón.
Durante el evento de agosto del año pasado, que destruyó gran parte de la infraestructura, se realizó un gran trabajo integral de recuperación de las zonas dañadas, lo que significó una inversión municipal del orden de los 400 millones de pesos.