Óscar D’León y jurado del pueblo compartieron con abuelitos de hogar «Hermanita de los Pobres»
Por Oficina de Prensa, Viña del Mar.
Baladas y boleros es lo que interpretó el cantante venezolano Oscar D’León, a los abuelitos que son acogidos en el Hogar Hermanita de los Pobres de Gómez Carreño, llevándoles de esta manera alegría y entretención a quienes necesitan tanto cariño.
La visita se enmarcó en las actividades sociales asociadas al 56° Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, invitados por la alcaldesa Virginia Reginato y a dónde también acudió el Jurado del Pueblo, Náyade Jara.
Allí fueron recibidos por la directora, hermana Asunta y los cerca de 85 abuelitos que acoge este hogar que está presente en cuatro ciudades de Chile y en 32 países.
“Esta es una visita que hacemos casi todos los años durante el Festival, que nos permite que los abuelitos puedan disfrutar de los artistas y a nosotros llevar el Festival a otros sectores de la comuna. Por eso, muy feliz de haber traído a Oscar D’ León, quien los hizo cantar y entretenerse”, dijo la autoridad comunal.
El cantante venezolano, que cantó acompañado de músicos viñamarinos, se mostró muy contento de apoyar esta causa social y también adelanto un poco de lo que será su show que estará acompañado de su banda con una variedad muy amplia de sonidos.
Por su parte Náyade Jara indicó sentirse muy honrada de haber visitado este hogar tan hermoso “en que se da tanto amor a la gente que los necesita. Esto es muy positivo porque mucha gente quisiera vivir el festival como yo lo he estado haciendo en esta semana en que estoy en una nube y que he disfrutado a concho”.
La Congregación de las Hermanitas de los Pobres tiene como misión ejercer la hospitalidad con los ancianos necesitados, ofreciendo espacios en los que se promueva, defienda, cuide y celebre la vida, facilitando el desarrollo integral del anciano, y permitiendo la participación activa de quienes quieran colaborar. Aquí cuidan en espíritu de humilde servicio, formando una sola familia y guardando viva la herencia de su fundadora, Santa Juana Jugan, considerando que muchos de ellos tienen familias, pero es como si no la tuvieran, y en este hogar los acogen para no quedar en soledad y en la indigencia.