Vecinos de Placilla y Laguna Verde denuncian nuevo vertimiento de aguas servidas a esteros
Presentaron denuncia ante Superintendencia de Servicios Sanitarios. Académica UPLA afirma que, al menos desde 2013, persiste contaminación.
La consejera regional Nataly Campusano, junto a la delegada municipal de Placilla y Peñuelas, Jennifer Araya, presentaron hoy a la Superintendencia de Servicios Sanitarios una solicitud de fiscalización en la planta de Esval ubicada en la zona por el peligro que reviste para la salud de la comunidad, debido a las descargas alteradas de la planta de tratamiento de aguas servidas de la empresa al estero Las Cenizas, hecho que ocurrió esta esta semana.
De acuerdo a los vecinos que denuncian, se trata de aguas de color café con un olor muy fuerte y que se estarían vertiendo desde hace días al estero Las Cenizas de Placilla, cuyas aguas desembocan en el estero El Sauce, el cual cruza toda la población de Laguna Verde.
“Hemos visto una irregularidad referida a las aguas servidas que se vierten a un espacio que afecta a parte importante de la población de Placilla, Peñuelas y Laguna Verde, donde los residuos desembocan. Por lo tanto, hemos hecho esta solicitud a la Superintendencia de Servicios Sanitarios para que de forma inmediata se haga presente en el lugar, y sancione a los causantes de esta anomalía que afecta a los ciudadanos, y al medio ambiente. Esto no nació ayer, porque los vecinos hace mucho tiempo están esperando respuestas a denuncias que han realizado desde”, sostuvo la CORE Araya.
La autoridad precisó que espera que la empresa sanitaria no solo sea sancionada con multas, sino con medidas que beneficien a la población, y de paso se modifique la normativa que rige a dichas entidades, que a su parecer resulta blanda.
En tanto, la delegada municipal de Placilla y Peñuelas, Jennifer Araya, aseguró que desde el 2018 generaron una mesa de trabajo con los vecinos más afectados de Villa Cardenal Samoré, que se ubica a un costado de la planta de tratamiento de Esval.
“Se presentó una solicitud en ese entonces al Superintendente de Servicios Sanitarios, donde se comprometió a un trabajo con Esval. Se realizaron dos reuniones, se comprometió una mesa de trabajo con la comunidad de manera permanente y eso, finalmente, no desembocó en nada. No se tomaron las medidas correspondientes y hoy nuevamente nos vemos enfrentados a esta problemática de años”, expresó la delegada Araya.
Descargas superan la norma
Desde el 2013 la académica de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas, Dra. Cecilia Rivera, ha desarrollado investigaciones sobre las aguas superficiales y subterráneas de Laguna Verde, registrando un alto grado de contaminación.
“En nuestros estudios la mayor contaminación que genera la empresa es por alta materia orgánica. La empresa debiera cumplir con el DS 90 o Decreto de Emisión para Vertimiento en Aguas Superficiales y no superar los 35 miligramos por litro, y nosotros hemos encontrado valores de 1.400, 1.600 milígramos, y este año encontramos en el estero El Sauce concentraciones de 100 milígramos por litro. Si bien se ha ido mejorando, ellos debieran cumplir con 35 milígramos por litro, por lo que todavía está fuera de norma”, explicó la Dr. Rivera.
Respecto del riesgo que estas aguas significan para la población, la académica dijo que al tratarse de un agua industrial debiera estar cumpliendo la norma antes mencionada y ser óptima para riego, sin embargo, debiera estar prohibido para cualquier uso.
“En Laguna Verde en la desembocadura se practica kayak con agua industrial, pero el PH es alto, tiene coliformes, materia orgánica y turbiedad, que ha hecho que se ahoguen personas en los últimos años por la cantidad de materia orgánica que se acumula. Además, el agua superficial contamina las napas de aguas subterráneas”, afirmó la académica UPLA.